23/2/11

Esa ventana...


Cada día, ella se asomaba por esa ventana. A través de ese vidrio, se le abría un mundo de sensaciones nuevas.
Un día se descubrieron mirando en la misma dirección.
Él siempre que podía pasaba por la puerta de su casa sólo para alzar la vista hacia ese lugar, esperando verla, tener noticias suyas.
A veces la observaba con la vista perdida en vaya a saber dónde...
En otras ocasiones la encontraba con una sonrisa que le iluminaba la cara...
Alguna noche le pareció percibir las lágrimas que rodaban por sus mejillas...
Y en muy contadas ocasiones, sus miradas se cruzaban y creía tocarle las manos.
Él hacía su vida pensando de tanto en tanto en ella. Ella  la suya, muy lejos de la de él.  Pero a solas consigo misma debía reconocer que sin quererlo, muchas veces su imagen estaba instalada en sus pensamientos... Y en su corazón?
¿Por qué  le ocurría eso si su vida era todo lo perfecta que una persona puede esperar? Amaba como el primer día a su compañero de siempre, sus hijos le llenaban la vida y su trabajo la completaba.
¿Qué lugar ocupaba ese hombre entonces?
El mínimo contacto que compartían les permitía conocerse mucho más de lo que creían. A la distancia, pero a la vez muy cerca...
Extraño destino de dos desconocidos, que sentían conocerse en profundidad, aunque tal vez sus caminos nunca llegaran a cruzarse realmente.

19/2/11

Estos días grises me ayudan a ver el sol que anida en mí...
Después de tantas tormentas internas al fin parece salir el sol, encontrando el equilibrio deseado.
Cuando el viento y la lluvia azotan, uno echa mano de lo que tiene más cerca para cubrirse...Y no siempre es el paraguas adecuado. A veces toma prestado un piloto que no le pertenece y tarde o temprano hay que volverlo a su lugar.
Cuando los pies van aplastando charcos que incomodan, humedeciendo las neuronas y nublando los sentimientos, muchas veces nos sentimos tentados de cruzar a la vereda de enfrente para ver si desde allí, la tormenta se ve diferente, o si al menos alcanzamos a ver un rayo de sol.
Ayer, desde mi ventana....
A veces hasta aparece alguna mano cálida, ofreciendo su ayuda para cruzar la calle, al parecer, sin mayores consecuencias.Por momentos nos negamos por temor a lo que pueda pasar. Otras nos aferramos fuertemente creyendo que allí está la salida a nuestra desorientación. Pero luego comprendemos que la tormenta sigue allí arriba, sólo que asusta menos cuando estamos acompañados.
¡Cuánto más fuertes nos sentimos si logramos llegar a casa, aunque empapados, pero habiéndonos sentido capaces de afrontarlo solos!
¡Qué diferente se puede ver el agua caer, luego de haber comprobado por nosotros mismos, que seguro, seguro, después sale el sol! Aunque tarde....
Definitivamente, mi ventana me muestra un cielo increíblemente gris....
Hoy prefiero mirar mi interior... Allí... el sol me hace un guiño y me invita a disfrutarlo.

15/2/11

Sólo se vive una vez....


Sencillamente este es el saldo de mis hermosas vacaciones....
Dejar de pensar, dedicarme a disfrutar de lo más mínimo...
Mi mar querido....el horizonte que me transportó más allá de mí...
Un libro bajo el brazo para disfrutar mi tiempo personal de la mejor manera...
La risa de mi familia, la música más hermosa para el alma...
Dormir, escuchar música,olvidarme del reloj y del resto del mundo...
Sólo mi familia y mis amigos...lo mejor de la vida!!!!